Cuando estamos inseguros, tristes, bajoneados o desganados, nuestro cuerpo adopta una postura en particular. Ni siquiera tenés que pensar mucho cual es, te la podes imaginar enseguida.
Lo mismo pasa cuando nos sentimos ganadores, poderosos, seguros o exitosos.
"Lo que pensamos y sentimos afecta nuestro cuerpo, nuestros movimientos y nuestra postura. Pero resulta que lo inverso también funciona: nuestra postura, puede afectar cómo nos sentimos".
Eso fue lo que descubrió la psicóloga social Amy Cuddy de la universidad de Hardvard.
Y eso se da porque las posturas influyen en los niveles de testosterona y cortisol en nuestro cuerpo, hormonas que están ligadas directamente a sentirnos más seguros, más positivos u optimistas, tener más confianza en nosotros mismos y tomar más riesgos.
Mira esta interesante charla TED sobre posturas de poder, algo que podés incorporar a tu día a día muy fácilmente y sólo te lleva unos pocos minutos!
Para verla con subtítulos en español tenés que abrir el video en la página de YouTube y activarlos ahí.
Que la disfrutes!
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